La importancia de la política de seguridad y salud ocupacional radica, principalmente, en que representa la mejor herramienta para proteger la vida y la integridad física y mental de los trabajadores.
Algo imprescindible si se tiene en cuenta que, según estimaciones recientes publicadas por la Organización Internacional del Trabajo (OIT), 2,78 millones de personas mueren cada año a causa de accidentes laborales y enfermedades profesionales, mientras que otras 374 millones padecen accidentes no mortales en sus empleos.
Sumado a esto, un buen sistema de gestión de seguridad y salud ocupacional permite a la empresa cumplir con la normativa correspondiente como:
- Ley 16.744 sobre Accidentes del Trabajo y Enfermedades Profesionales.
- Código del Trabajo (artículos 184 y siguientes).
- Código Sanitario Libro III.
- Política Nacional de Seguridad y Salud en el Trabajo.
Importancia de la política de seguridad y salud ocupacional
Ejecutar una política de seguridad y salud ocupacional también permite establecer en la empresa una cultura orientada a prevenir, controlar y reducir los riesgos laborales, mientras se disfrutan de diferentes beneficios:
- Evita el pago de multas por incumplimiento de disposiciones legales.
- Mejora la imagen de la empresa.
- Mejora el ambiente laboral.
- Disminuye la rotación del personal, gracias al buen ambiente laboral y a que los trabajadores ven que la empresa se preocupa por su bienestar.
- Aumento de la productividad, pues en un ambiente seguro los flujos de trabajo son más rápidos.
- Reduce los costos asociados al absentismo y a la detención de procesos.
Frente al último punto, hay que tener presente que, según las cifras de la OIT citadas líneas atrás, los días de trabajo perdidos representan entre el 4% y el 6% del PIB mundial.
En Chile, solo en abril de 2020 se registraron 33,2 días perdidos por cada accidente, según un informe de la Superintendencia de Seguridad Social.
¿Cómo hacer una política de seguridad y salud ocupacional?
Un plan de seguridad y salud ocupacional consiste en la planeación y ejecución de actividades orientadas a mitigar los riesgos de accidentes laborales y enfermedades profesionales.
Para elaborarlo se siguen estos puntos:
Evaluación inicial
La empresa identifica las disposiciones legales vigentes en materia de seguridad y salud en el trabajo, los riesgos existentes en cada área y los controles para mitigarlos. La idea es usar está evaluación para la planificación de las actividades de seguridad y salud en el trabajo.
Se establecen objetivos
Con base en dicha evaluación, se plantean los objetivos del sistema de gestión de seguridad y salud ocupacional. Estos deben ser específicos, medibles y centrarse en la mejora continua del plan.
Se establecen medidas de prevención y control
Con fundamento en los riesgos identificados, se crean las actividades y medidas de prevención y control para eliminarlos o, en su defecto, controlarlos o mitigarlos.
Prevención, preparación y respuesta a emergencia
Se implementan las medidas y procedimientos de prevención, preparación y respuesta a las situaciones de emergencia que podrían presentarse en la empresa.
Monitoreo y medición de los resultados
Es necesario monitorear, medir y recopilar periódicamente datos relativos al funcionamiento del plan de seguridad y salud ocupacional. Estos indicadores deben basarse en los riesgos identificados y ser tanto cualitativos como cuantitativos.
Una vez claro cómo hacer una política de seguridad y salud ocupacional, solo queda implementarlo, preferiblemente de la mano de expertos en la materia y teniendo en cuenta que -para una mayor efectividad del plan- es necesario someterlo a auditorías periódicas y mantener actualizada toda su documentación.
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